La magnetoterapia es un tratamiento que se utiliza en las sesiones de fisioterapia, dada la eficacia con el tratamiento de enfermedades que involucran músculos y esqueleto. En este artículo, veremos qué es la magnetoterapia, sus beneficios y efectos, y cómo se puede aplicar.
Qué es la magnetoterapia
La magnetoterapia es una técnica de fisioterapia que utiliza campos magnéticos estáticos o permanentes para tratar patologías musculoesqueléticas y relacionadas con la inflamación. A diferencia de la mayoría de las terapias, la magnetoterapia no produce efectos secundarios.
Definición y conceptos básicos
En la magnetoterapia se emplean imanes de alta o baja frecuencia para crear campos magnéticos mediante bobinas por donde pasan corrientes eléctricas. Estos campos magnéticos pueden tener diferentes intensidades y frecuencias, dependiendo de la patología a tratar.
La magnetoterapia produce efectos terapéuticos por la interacción de estos campos magnéticos con el tejido biológico del cuerpo.
Cómo funciona la magnetoterapia
La interacción entre los campos magnéticos y el tejido biológico produce diversas respuestas fisiológicas, como la relajación muscular, la producción de tejido óseo, la mejora de la vasodilatación, la reducción del dolor y la estimulación del retorno venoso.
Estos efectos se deben a la capacidad del campo magnético para modular procesos celulares y moleculares a nivel localizado, lo que estimula los procesos de reparación y regeneración de tejido.
Historia y evolución de la terapia con campos magnéticos
La magnetoterapia se remonta a la antigua Grecia, donde se utilizaban imanes para tratar artritis y dolor. En tiempos modernos, la terapia con campos magnéticos se ha desarrollado y evolucionado para mejorar su eficacia y seguridad.
Actualmente, la magnetoterapia es utilizada por fisioterapeutas y otros especialistas en diversas patologías musculoesqueléticas y condiciones relacionadas con la inflamación.
Aplicación de la magnetoterapia
La magnetoterapia es una técnica de fisioterapia que utiliza campos magnéticos para tratar una amplia variedad de patologías, especialmente aquellas relacionadas con el sistema musculoesquelético, la inflamación y los trastornos del sistema nervioso.
Enfermedades y lesiones tratables con magnetoterapia
La magnetoterapia se ha utilizado de manera efectiva en muchas áreas de la medicina. Entre ellas están:
Rehabilitación
- Osteoartritis
- Espondilitis anquilosante
- “Codo de tenista”
- “Hombro congelado”
- Trastornos postraumáticos
- Retraso en la curación de fracturas
- Osteomielitis crónica
- Síndrome de dolor complejo, incluido el de Sudeck
- Exostosis de talón
- Dolores de cabeza debidos a trastornos de columna
Ginecología
- Adherencias pequeñas en la pelvis
- Dolores después de la ruptura de quiste ovárico
- Endometriosis
Reumatología
- Artritis reumatoide
- Procesos inflamatorios
- Movilidad reducida de las articulaciones
- Artritis reumatoide en niños
- Síndrome miofascial
- Fibromialgia
Pediatría
- Distonia muscular en niños
- La otitis media
- La otitis externa
- Enfermedad de Werding – Hoffmann
- Enfermedad de Perthes
- Sinusitis
- Enuresis
Dermatología
- Úlcera crural
- Esclerodermia
- Prurito o quemazón de piel
- Psoriasis
- Quemaduras
- Dermatitis crónica
Urología
- Prostatitis crónica
- Disfunción sexual
- Enuresis nocturna o diurna
Medicina interna
- Asma bronquial
- Nefrosis, nefroesclerosis
- Insuficiencia hepática
Neurología
- Lumbalgia
- Ciática
- Parálisis de los nervios periféricos por cirugía o trauma
- Síndrome de túnel carpiano
- Neuralgia del trigémino
- Parálisis del nervio facial
Trastornos derivados del estrés
- Inquietud
- Insomnio
- Cefaleas tensionales
- Taquicardias emocionales
Cómo aplicar la magnetoterapia
La magnetoterapia se aplica mediante dispositivos electromagnéticos que generan campos magnéticos mediante bobinas con corrientes eléctricas. Estos dispositivos pueden utilizarse tanto en tratamientos generales como en tratamientos específicos para zonas del cuerpo determinadas.
La intensidad de la magnetoterapia puede variar, y debe ser adecuada al tipo de tratamiento y patología a tratar. La duración del tratamiento también puede variar, dependerá del tipo de patología y su gravedad.
Dispositivos y campos magnéticos
Existen diferentes dispositivos y campos magnéticos para la magnetoterapia, desde imanes permanentes hasta dispositivos con corrientes eléctricas de alta y baja frecuencia. Los campos magnéticos pueden aplicarse tanto en formato de onda continua como en formato de onda pulsada.
Duración y frecuencia del tratamiento
La duración del tratamiento dependerá del tipo de patología a tratar. Aunque en algunos casos se pueden ver mejoras inmediatas, en otros casos pueden ser necesarias varias sesiones.
La frecuencia de aplicación variará en función de la patología y se realizará en sesiones de aproximadamente 20-30 minutos. En general, se recomienda un tratamiento de al menos 10 sesiones para obtener mejores resultados.
Precauciones y contraindicaciones
La magnetoterapia no tiene efectos secundarios negativos, pero existen algunas precauciones y contraindicaciones que es importante tener en cuenta. La magnetoterapia no está indicada en mujeres embarazadas, pacientes con marcapasos y pacientes con cáncer.
En estos casos, es importante seguir las recomendaciones del especialista médico.
Beneficios y efectos de la magnetoterapia
La magnetoterapia es una técnica utilizada para tratar patologías musculoesqueléticas y relacionadas con la inflamación. La técnica utiliza campos magnéticos estáticos o permanentes para producir efectos terapéuticos en el cuerpo humano.
Beneficios físicos
La magnetoterapia producir efectos positivos en el cuerpo humano como la reducción del dolor y la inflamación, la producción de tejido óseo, relajación muscular, estimulación del retorno venoso y mejora de la vasodilatación.
Estos efectos son útiles en patologías como las contracturas musculares, tendinitis, luxaciones, esguinces y lesiones musculoesqueléticas. La magnetoterapia también se emplea en el tratamiento de la osteoporosis y la displasia de cadera.
Aumento de la producción de tejidos
La magnetoterapia estimula la producción de colágeno, que contribuye a la regeneración de los tejidos óseos y musculares dañados. Además, esta técnica incrementa la reparación del cartílago y mejora la producción de tejidos blandos.
Reducción del dolor y la inflamación
La magnetoterapia tiene una función analgésica, ya que produce una disminución de los niveles de dolor y de inflamación, permitiendo que las zonas afectadas puedan recuperar su función normal. Al reducir el dolor, se puede mejorar la calidad de vida del paciente.
Relajación muscular
El empleo de campos magnéticos de baja o alta frecuencia reduce las tensiones en los músculos, lo que se traduce en un efecto miorelajante, una disminución de la rigidez y en la relajación de las zonas afectadas.
Estimulación del retorno venoso
La magnetoterapia incrementa la circulación sanguínea y el retorno venoso, lo que resulta beneficioso para la prevención de ulceraciones y lesiones en la piel.
Mejora de la vasodilatación
La técnica de magnetoterapia mejora la vasodilatación, lo que tiene como resultado una mayor llegada de sangre y oxígeno a los tejidos y una aceleración del proceso de curación.
Beneficios psicológicos
La magnetoterapia puede producir beneficios psicológicos a través del alivio del dolor y la reducción de la ansiedad. Además, se ha demostrado que esta terapia puede mejorar el sueño y reducir los niveles de estrés.
Reducción del estrés y la ansiedad
La magnetoterapia produce una relajación en el cuerpo y reduce la ansiedad, disminuyendo los niveles de cortisol y mejorando el equilibrio emocional.
Mejora del sueño
La técnica de magnetoterapia puede mejorar la calidad del sueño al reducir el dolor y aliviar la tensión muscular, contribuyendo a una correcta regeneración y reparación del organismo.
Efectos secundarios
La principal ventaja de la magnetoterapia es que no produce efectos secundarios, lo que la convierte en una terapia segura. Sin embargo, existen algunas precauciones y contraindicaciones que deben tenerse en cuenta, como, por ejemplo, su uso no está indicado en mujeres embarazadas, pacientes con marcapasos o cáncer.
Campos magnéticos de baja frecuencia
El uso de campos magnéticos de baja frecuencia puede producir mareos, náuseas, fatiga o dolores de cabeza, aunque estos efectos son poco frecuentes.
Campos magnéticos de baja intensidad
El uso de campos magnéticos de baja intensidad puede producir efectos secundarios leves como calambres musculares o sensación de quemazón.
Magnetoterapia de baja frecuencia
La magnetoterapia de baja frecuencia utiliza campos magnéticos de baja intensidad para tratar diferentes patologías. A continuación, se detallan los principales aspectos de esta técnica terapéutica.
Definición y funcionamiento
La magnetoterapia de baja frecuencia se basa en la aplicación de campos magnéticos de baja intensidad sobre la zona del cuerpo a tratar. Estos campos magnéticos generan corrientes eléctricas débiles que estimulan y activan las células y los tejidos del cuerpo para que se recuperen más rápidamente.
Tratamientos y usos de la magnetoterapia de baja frecuencia
Este tipo de magnetoterapia se utiliza en diferentes patologías, entre ellas:
- Lesiones musculares y esqueléticas como esguinces, contracturas, dolores lumbares, tendinitis, entre otras.
- Inflamaciones crónicas y agudas, como en los casos de artritis o artrosis.
- Trastornos del sistema nervioso, como el síndrome del túnel carpiano o la neuralgia postherpética.
- Problemas de osteoporosis, ya que la magnetoterapia de baja frecuencia ayuda a mejorar la densidad ósea.
- Displasia de cadera, ya que ayuda a mejorar la regeneración del tejido óseo y muscular.
Intensidad y frecuencia de la aplicación
La intensidad y frecuencia de la aplicación de la magnetoterapia de baja frecuencia dependerá de la patología a tratar y del paciente. En términos generales, las sesiones tienen una duración de 15 a 30 minutos y pueden variar de una a tres sesiones semanales.
Duración del tratamiento
La duración del tratamiento también dependerá de la patología a tratar y del paciente. En términos generales, la magnetoterapia de baja frecuencia se recomienda durante un periodo de cuatro a ocho semanas.
Resultados y eficacia
La magnetoterapia de baja frecuencia ha demostrado ser una técnica terapéutica efectiva en una amplia variedad de patologías. Los resultados pueden variar dependiendo de cada paciente y su patología, pero entre los principales efectos positivos de la magnetoterapia de baja frecuencia se encuentran:
- Reducción de la inflamación y del dolor.
- Aceleración de la cicatrización de las lesiones.
- Mejora la regeneración y producción de tejidos.
- Aumenta la densidad ósea y muscular.
- Mejora la circulación sanguínea y linfática.
- Mejora la relajación muscular y reduce el estrés y la ansiedad.
Magnetoterapia de alta frecuencia
La magnetoterapia de alta frecuencia es una técnica que utiliza campos magnéticos para tratar diversas patologías musculoesqueléticas, inflamatorias y relacionadas con la cronicidad. Se emplean campos magnéticos de alta frecuencia para crear diferentes efectos en el cuerpo a nivel celular y tisular.
Esta técnica se basa en la aplicación de campos magnéticos pulsantes que varían su frecuencia de forma aleatoria, lo que permite al cuerpo responder de diferentes formas y así obtener los beneficios terapéuticos deseados.
Tratamientos y usos de la magnetoterapia de alta frecuencia
La magnetoterapia de alta frecuencia se utiliza para tratar numerosas patologías musculoesqueléticas, inflamatorias y relacionadas con la cronicidad. Entre las patologías más habituales se encuentran la osteoporosis, la artritis, la artrosis, el dolor muscular, entre otros.
Patologías tratadas
- Osteoporosis
- Artritis
- Artrosis
- Dolor muscular
Intensidad y frecuencia de la aplicación
- Las intensidades utilizadas suelen ser mayores que en la magnetoterapia de baja frecuencia, pudiendo alcanzar los 1000 Gauss.
- La frecuencia de aplicación depende de la patología a tratar, y suelen variar entre los 10 y los 30 Hz.
- La duración del tratamiento también depende de la patología a tratar, pero suele oscilar entre los 15 y los 30 minutos por sesión.
Resultados y eficacia
- La magnetoterapia de alta frecuencia produce efectos antiinflamatorios, estimula la producción de colágeno y mejora la regeneración celular.
- Esta técnica es muy eficaz en el tratamiento del dolor crónico y en procesos inflamatorios.
- Se ha demostrado su eficacia en el alivio del dolor postoperatorio y en la reducción de los tiempos de recuperación tras lesiones musculares y óseas.
Preguntas frecuentes sobre magnetoterapia
A continuación, se resuelven algunas preguntas frecuentes que suelen surgir en torno a la magnetoterapia, su aplicación y efectividad.
¿Cuántas sesiones de magnetoterapia son necesarias para tratar una lesión?
No hay una respuesta específica a esta pregunta, ya que dependerá del tipo de lesión y de su gravedad, así como de la respuesta individual del paciente al tratamiento. En general, se suelen realizar entre 10 y 20 sesiones de magnetoterapia, con una duración de entre 20 y 30 minutos cada una, aunque esto puede variar según el caso concreto.
¿Cómo se aplica la magnetoterapia en una zona específica del cuerpo?
La magnetoterapia se aplica con dispositivos específicos que generan campos magnéticos de baja o alta frecuencia.
Para tratar una lesión o dolencia en una zona específica del cuerpo, es necesario colocar los dispositivos en contacto directo con la piel, ya sea mediante parches o mediante una capa de tejido. Es importante seguir las instrucciones del especialista para conseguir los mejores resultados.
¿Se puede utilizar la magnetoterapia junto con otros tratamientos?
Sí, la magnetoterapia puede complementar otros tratamientos como la fisioterapia o la acupuntura, por ejemplo. De hecho, en algunos casos puede ser recomendable combinar varias técnicas para conseguir una recuperación más eficaz y rápida.
¿La magnetoterapia puede ser perjudicial en algún caso?
La magnetoterapia no produce efectos secundarios y no es dolorosa, pero no se recomienda en pacientes con marcapasos, cáncer o mujeres embarazadas, ya que puede interferir con la actividad eléctrica del corazón o tener efectos sobre el feto. Es importante que el especialista valore cada caso concreto antes de realizar el tratamiento.
¿Cuánto tiempo tarda en hacer efecto la magnetoterapia?
El tiempo que tarda en notarse una mejoría dependerá del tipo de lesión o dolencia tratada, así como de la frecuencia y duración del tratamiento. En general, se suele notar una mejoría después de varias sesiones, aunque esto puede variar según el caso concreto.
¿La magnetoterapia duele o es dolorosa?
No, la magnetoterapia no es dolorosa y no produce molestias. En general, se trata de una técnica de fisioterapia muy cómoda para el paciente, ya que este sólo tiene que permanecer relajado mientras los dispositivos realizan su función.
¿Se puede realizar la magnetoterapia en casa o hay que acudir a un especialista?
La magnetoterapia puede ser realizada tanto por un especialista en la consulta como en casa, siempre y cuando se utilicen los dispositivos adecuados y se sigan las instrucciones del especialista.
Sin embargo, es recomendable acudir a un especialista para un diagnóstico y prescripción adecuada de tratamiento, ya que este podrá adaptar la intensidad y frecuencia de la magnetoterapia a las necesidades específicas del paciente.
Consideraciones finales
Como has podido ver, esta terapia con muchos aspectos positivos, pero también hay una serie de factores limitantes que no permiten recibir dicho tratamiento.
Una alternativa a la terapia magnética es la terapia TENS o Electroestimulación percutánea de los nervios, ya que cuenta con un gran número de beneficios, y muy pocas contraindicaciones. Puedes revisar nuestros equipos de electroestimulación tens en nuestra tienda.
